jueves, 7 de febrero de 2013

De decisiones...por esas pasiones


Implicarte, tomar parte en la justa medida de esa incertidumbre que es la vida. Apostar por eso que creemos nos apasiona es de alguna manera un salto al vacío, un arrojarse sin saber, solo con la certeza de algo que impulsa, que insiste, cayendo muchas veces en lo irracional, sabiendo sólo que insiste.

Y así es como emprendemos un viaje, en el que justamente dejamos de ser turistas cuando nos vemos en esa implicancia, en esa revisión de las decisiones que nos llevaron hasta determinado lugar, y que ahí nos tienen, haciéndonos viajeros de ese recorrido sin guía turístico ni lugares recomendados, todo lo contrario, visitando incluso en muchas ocasiones lugares que no son gratos, en donde aparece el miedo, y nos hacen tambalear.

Es ese viaje, para el cual no es necesario salir de nuestras tierras, en el que justamente pasamos a ser extranjeros, y qué más difícil que ser extranjero en tu propia casa…Pero el viaje ya está emprendido, el impulso sigue, y lo que a veces se recubre pero sigue ahí, como telón de fondo de la historia que entretejemos es la pasión, eso que nos movilizó. Cómo no cuestionarlo, cómo no querer volver, como si se pudiera, a ese regazo desde el cual salimos, en los momentos en que se hace cada vez más difícil soportar aquello de lo que quisimos tomar el mando…nuestra vida.

Justamente ahí es donde radica el más sutil y mayor de los engaños,  cómo hacernos cargo de algo de lo que sólo ilusamente somos agentes? Cómo mantener las fuerzas cuando el destino pareciera imponerse de manera aplastante?...lamentablemente aún no encuentro la respuesta,  y no creo que la encuentre, más bien, creo poder vislumbrar ciertas diferencias con tomar este viaje o seguir siendo turistas de lo que vemos, como por fuera de nosotros.  Una y la más radical, es que pese a todo el agobio que esto conlleva, nunca había conocido algo tan fuerte y movilizante como apostar a una pasión,  y si, no sabemos si llevará a buen puerto, si no estamos quizás locos, casi con la fuerza insistente de un delirio, incuestionable, pero sólo el poder sentirla luego de tanto tiempo de vivir observando asegurada y pasivamente es impagable…pase lo que pase y con el miedo que esto implica…


Lorena Alvarez
lorenapaz.alvarez@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Interroga, cuestiona, debate, pregunta, refuta..... nos interesa escuchar.